La duquesa de Sussex no es muy querida entre los funcionarios de palacio de Buckingham, debido a su carácter exigente.
La personalidad complicada de Meghan Markle, tan comentada desde su llegada a la Familia Real británica, vuelve a la palestra. Esto tras la emisión el pasado viernes de «Meghan and Harry plus One», un programa especial sobre el nacimiento de Archie Harrison.
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El espacio de televisión fue creado y conducido por Gayle King, una de las mejores amigas de la duquesa, pero no era una «oda» a ella, como algunos se temían, especialmente después de ver las promociones, en las que solo aparecían algunos amigos cercanos a la ex actriz, como Daniel Martin o Janina Gavankar, alabando sus virtudes.
Y es que el programa también contó con las opiniones de varios periodistas especializados en la familia real que no tuvieron piedad ninguna, dando la imagen menos dulce de Meghan. «Creo que no es popular en muchos círculos. A menudo es porque adoran a Harry y piensan que ella está haciendo un papel», dijo un entrevistado, mientras que otros testimonios destacan la cantidad de empleados que han abandonado la Casa Real desde que se unió Meghan, calificándola de extraordinariamente ambiciosa, difícil y exigente, consigna Vanitatis.
Así es como también se revelaron los apodos con que algunos empleados de Buckingham se refieren a ella. Por ejemplo, Meghan «la difícil», en referencia a todas las peticiones que hace a los funcionarios de palacio, desde muy temprano en la mañana.
Pero no es el único. Algunos empleados de Buckingham se referían a ella como «Me-gain», con relación a los kilos que había ganado durante el embarazo. Y sus más críticos han llegado a llamarla «Meg-Antoniette», haciendo referencia a la odiada reina francesa por su supuesto carácter derrochador.
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